No existe distancia entre el amor al prójimo y la voluntad de justicia. Pero es, ante todo, por la fuerza de su Misterio Pascual que Cristo nos ha liberado[55]. [32] Cf. A menudo la voluntad del momento no es la voluntad real. Todos ellos tienen base evangélica y están de acuerdo con la naturaleza humana, que la Iglesia asume y defiende, buscando llevarla a la plenitud, por la Redención obrada por Cristo. Tal participación puede revestir formas diversas; es necesaria para garantizar un justo pluralismo en las instituciones y en las iniciativas sociales. 35-36; Mc 6, 34; Mt 9, 36; 18, 21 s. [76] Cf. Las transformaciones técnicas y económicas repercuten en la organización de la vida social; no dejan de afectar en cierta medida a la vida cultural y a la misma vida religiosa. El mismo sentido de la fe del Pueblo de la Dios, en su devoción llena de esperanza en la cruz de Jesús, percibe la fuerza que contiene el misterio de Cristo Redentor. De estos dos preceptos penden toda la Ley y los Profetas» (Mt 22, 39-40). Esta requiere su aplicación en el terreno del trabajo industrial y de una manera más particular en el del trabajo agrícola[132]. Su función es promover y proteger la vida cultural de todos, incluso la de las minorías[137]. [10]Se le acusa sin embargo de constituir por sí misma un obstáculo en el camino de la liberación. Lejos de perfeccionarse en una total autarquía del yo y en la ausencia de relaciones, la libertad existe verdaderamente sólo cuando los lazos recíprocos, regulados por la verdad y la justicia, unen a las personas. Ni el pretendido principio de la «seguridad nacional», ni una visión económica restrictiva, ni una concepción totalitaria de la vida social, deberán prevalecer sobre el valor de la libertad y de sus derechos[140]. Más aún Cristo, en su condición humana, eligió un estado de pobreza e indigencia [96] a fin de mostrar en qué consiste la verdadera riqueza que se ha de buscar, es decir, la comunión de vida con Dios. Al menos desde el Concilio Vaticano II, la Iglesia es plenamente consciente de estas tres verdades fundamentales que definen la naturaleza de la DSI: «La misión propia que Cristo confió a su Iglesia no es de orden político, económico o social. La perfección, imagen de la del Padre, a la que todo discípulo debe tender, está en la misericordia[70]. El documento actual se limita a indicar los principales aspectos teóricos y prácticos. La auténtica libertad es «servicio de la justicia», mientras que, a la inversa, la elección de la desobediencia y del mal es «esclavitud del pecado»[19]. 35. [54] Cf. Deben leerse uno a la luz del otro. Constitución pastoral Gaudium et spes y Declaración Dignitatis humanae del Concilio Ecuménico Vaticano II; Encíclicas Mater et Magistra, Pacem in terris, Populorum progressio, Redemptor hominis y Laborem exercens; Exhortaciones Apostólicas Evangelii nuntiandi y Reconciliatio et paenitentia; Carta Apostólica Octogesima adveniens. Más aún, el Hijo de Dios, que se ha hecho pobre por amor a nosotros [52] quiere ser reconocido en los pobres, en los que sufren o son perseguidos[53]: «Cuantas veces hicisteis esto a uno de estos mis hermanos menores, a mí me lo hicisteis» (Mt 25, 40)[54]. El tercer principio clásico de la doctrina social es el principio de la subsidiariedad. Cristo centro del PEI de nuestras escuelas Propósito del Plan de Formación Ciudadana Plan de Formación Ciudadana sustentado en los principios de la Doctrina Social de la Iglesia Ejes temáticos [114] Cf. ?os de doctrina social de la Iglesia. Tales acuerdos deben respetar el derecho de los inmigrantes y de sus familias[129]. or reset password. 3. Lo hemos hecho como pastores que queremos seguir impulsando la acción evangelizadora de la Iglesia, llamada a hacer de todos sus miembros discípulos y misioneros de Cristo, Camino, Verdad y Vida para que nuestros pueblos tengan vida en Él. El primer fundamento de la enseñanza social católica es el mandamiento de Jesús de amar: Ama a Dios sobre todas las cosas y ama a tu prójimo como te amas a ti mismo. Puesto que el bien común de la sociedad humana está al servicio de las personas, los medios de acción deben estar en conformidad con la dignidad del hombre y favorecer la educación de la libertad. Se da en ello una acción común que requiere un esfuerzo concertado y constante para encontrar soluciones técnicas concretas, pero también para crear una nueva mentalidad entre los hombres de hoy. El hombre, por su acción libre, debe tender hacia el Bien supremo a través de los bienes que están en conformidad con las exigencias de su naturaleza y de su vocación divina. La misma Iglesia es el germen y el comienzo del Reino de Dios aquí abajo, que tendrá su cumplimiento al final de los tiempos con la resurrección de los muertos y la renovación de toda la creación[77]. Los principios fundamentales y los criterios de juicio inspiran directrices para la acción. Principios de la doctrina social de la Iglesia Esta preocupación de la Iglesia se concreta en valores que sirven de base para la actuación social. En esta misión, la Iglesia enseña el camino que el hombre debe seguir en este mundo para entrar en el Reino de Dios. Resulta evidente que en el marco la reconfiguración de los servicios públicos provocada en nuestro país a partir de las privatizaciones de la década de 1980, surge un nuevo modelo de ellos, forzado tanto ideológica como normativamente a partir de los cambios producidos desde la década de 1970 y que solo a fines de la década de 1990 ha empezado a … La moral y Dios, ¿obstáculos para la liberación? A la luz de esta imagen, podemos decir que el principio de subsidiariedad permite a cada uno asumir el propio rol para el cuidado y el destino de la sociedad. Enter the email address you … 38. La Instrucción «Libertatis nuntius» sobre algunos aspectos de la teología de la liberación anunciaba la intención de la Congregación de publicar un segundo documento, que pondría en evidencia los principales elementos de la doctrina cristiana sobre la libertad y la liberación. Esto es la señal de que graves ambigüedades sobre el sentido mismo de la libertad se han infiltrado en el interior de este movimiento desde su origen. La libertad en la experiencia del Pueblo de Dios. De ese modo, se desconocían las profundidades de esta libertad y de sus exigencias. La razón creada, al abrirse a la verdad divina, encuentra una expansión y una perfección que constituyen una forma eminente de libertad. Pero una multitud de cristianos, ya desde el tiempo de los Apóstoles, han dedicado sus fuerzas y sus vidas a la liberación de toda forma de opresión y a la promoción de la dignidad humana. Así el obstáculo que se opone a su voluntad no siempre viene de fuera, sino de los límites de su ser. Existen hombres, que aun sufriendo terribles coacciones consiguen manifestar su libertad y ponerse en marcha para su liberación. El don divino de la salvación eterna es la exaltación de la mayor libertad que se pueda concebir. Si su edad es menor a la legal establecida, puede considerarse trabajo infantil y puede ser ilegal a menos que tenga, en ciertos casos, permiso de sus padres o tutores. Estos principios fundamentan los criterios para emitir un juicio sobre las situaciones, las estructuras y los sistemas sociales. De los 49 países que conforman el continente europeo, en aproximadamente 13 de ellos está vigente la recaudación del de impuesto eclesiástico: Alemania, Austria, Portugal, Hungría, Italia, Croacia, Dinamarca, Finlandia, Suecia, Suiza, España, Polonia e Islandia. También el presente documento puede favorecer el testimonio y la acción de todos los discípulos de Cristo llamados a responder a los grandes retos de nuestro tiempo. 40. Este es el principio supremo de la moral social cristiana, fundada sobre el Evangelio y toda la tradición desde los tiempos apostólicos y la época de los Padres de la Iglesia, hasta la recientes intervenciones del Magisterio. Ex 13, 13; Dt 9, 26; 15, 15; Sal 130, 7-8. Para comprender esto, muchos de nuestros contemporáneos deben descubrir nuevamente el sentido del pecado. Mt 5, 9; Rom 12, 18; Heb 12, 14. El Evangelio es un mensaje de libertad y una fuerza de liberación[31] que lleva a cumplimiento la esperanza de Israel, fundada en la palabra de los Profetas. De manera particular, la Iglesia se vuelve con afecto maternal hacia los niños que, a causa de la maldad humana, no verán jamás la luz, así como hacia las personas ancianas solas y abandonadas. Constitución pastoral Gaudium et spes, n. 29; Juan XXIII, Encíclica Pacem in terris, nn. Sin embargo, San Pablo reconoce que la Ley conserva su valor para el hombre y para el cristiano puesto que «es santa, y el precepto santo, justo, y bueno» (Rom 7, 12)[64]. Pero muy a menudo el pueblo se siente frustrado de su independencia duramente conquistada por regímenes o tiranías sin escrúpulos que atentan impunemente a los derechos del hombre. El sentido de la fe percibe toda la profundidad de la liberación realizada por el Redentor. En este contexto es donde debe apreciarse el interés de la Ley Bíblica por los pobres, los desheredados, la viuda y el huérfano; a ellos se debe la justicia según la ordenación jurídica del Pueblo de Dios[38]. 2. No compete a la autoridad pública determinar el tipo de cultura. Cristo Jesús, de rico se hizo pobre por nosotros, para enriquecernos mediante su pobreza[95]. V. La Iglesia Pueblo de Dios de la Nueva Alianza. Por esto, so pena de destruirse, el hombre debe aprender a que la voluntad concuerde con su naturaleza. Párrafo primero del número 2 de la disposición transitoria cuarta redactado por el apartado uno del artículo único de la Ley 4/2017, de 28 de junio, de modificación de la Ley 15/2015, de 2 de julio, de la Jurisdicción Voluntaria («B.O.E.» 29 junio). UN HUMANISMO INTEGRAL Y SOLIDARIO . Todos los compromisos que brotan de la Doctrina Social de la Iglesia «provienen de la caridad que, según la enseñanza de Jesús, es la síntesis de toda la Ley (cf. Libertad del hombre y dominio de la naturaleza, 34. CAPÍTULO V LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA: POR UNA PRAXIS CRISTIANA DE LA LIBERACIÓN, 71. A la luz de este mandamiento, el apóstol Santiago recuerda severamente a los ricos sus deberes[74], y San Juan afirma que quien teniendo bienes de este mundo y viendo a su hermano en necesidad le cierra su corazón, no puede permanecer en él la caridad de Dios[75]. La respuesta espontánea a la pregunta «¿qué es ser libre?» es la siguiente: es libre quien puede hacer únicamente lo que quiere sin ser impedido por ninguna coacción exterior, y que goza por tanto de una plena independencia. 1188. Dios, al crear libre al hombre, ha impreso en él su imagen y semejanza[17]. Preguntas y respuestas actividad práctica doctrina social de la iglesia lee sintetiza el significado de cada uno de los principios de la doctrina social de la. Sin embargo, él llega a ser semejante no en la arbitrariedad de su capricho, sino en la medida en que reconoce que la verdad y el amor son a la vez el principio y el fin de su libertad. San Agustín, De Civitate Dei, XIV, 28: PL 41, 435; CSEL 40/2, 56-57; CCL 14/2, 451-452. Un trabajador es la persona física que con la edad legal mínima presta servicios retribuidos subordinados a otra persona, a una empresa o institución. Somos liberados del amor desordenado hacia nosotros mismos, que es la causa del desprecio al prójimo y de las relaciones de dominio entre los hombres. En realidad el hombre, cuando atribuye a las creaturas una carga de infinitud, pierde el sentido de su ser creado. La rectitud de costumbres es condición para la salud de la sociedad. El pecado del hombre, es decir su ruptura con Dios, es la causa radical de las tragedias que marcan la historia de la libertad. Esto se pone particularmente de manifiesto cuando el pecador cree que no puede afirmar su propia libertad más que negando explícitamente a Dios. 12. Pecando el hombre se engaña a si mismo y se separa de la verdad. [129] Cf. [94] Cf. Son igualmente inadmisibles las odiosas campañas de calumnias capaces de destruir a la persona psíquica y moralmente. La Jerusalén nueva que esperamos con ansia es llamada justamente ciudad de libertad, en su sentido más pleno[79]. Es, por tanto, plenamente legítimo que quienes sufren la opresión por parte de los detentores de la riqueza o del poder político actúen, con medios moralmente lícitos, para conseguir estructuras e instituciones en las que sean verdaderamente respetados sus derechos. Tal es su dignidad que ninguno de los poderosos puede arrebatársela; tal es la alegría liberadora presente en ellos. Password. Todos ellos tienen base evangélica y están de acuerdo con la naturaleza humana, que la Iglesia asume y defiende, buscando llevarla a la plenitud, por la Redención obrada por Cristo. Análisis de las Constituciones Peruanas de 1979 y 1993; III. [123] Cf. Cuando la Iglesia hace esa llamada, es consciente de que esto le concierne de una manera muy particular. La transfiguración de la Iglesia, obrada por Cristo resucitado, al llegar al final de su peregrinación, no anula de ningún modo el destino personal de cada uno al término de su vida. Esta verdad que viene de Dios tiene su centro en Jesucristo, Salvador del mundo[4]. Reflexiones del Teólogo de la Casa Pontificia, Wojciech Giertych O.P., acerca de las Virtudes Cardinales. En realidad, sin la resurrección de los muertos y el juicio del Señor, no hay justicia en el sentido pleno de la palabra. La doctrina social de la Iglesia no propone ningún sistema particular, pero, a la luz de sus principios fundamentales, hace posible, ante todo, ver en qué medida los sistemas existentes resultan conformes o no a las exigencias de la dignidad humana. Descubrimiento científico y progreso moral. 3. Estas palabras de la serpiente manifiestan la esencia de la tentación del hombre; implican la perversión del sentido de la propia libertad. 18. Su capacidad de realizarse no se suprime de ningún modo por su dependencia de Dios. Pablo VI, Exhortación Apostólica Evangelii nuntiandi, nn. 47-49; Rt 3, 12; 4, 1. Niega a Dios y se niega a sí mismo cuando busca la total autonomía y autarquía. [88] Cf. Asimismo, una liberación que no tiene en cuenta la libertad personal de quienes combaten por ella está de antemano, condenada al fracaso. Primacía de las personas sobre las estructuras. Pretende encontrar su centro y su unidad en si mismo. Instrucción Libertatis nuntius, IV, 5: AAS 76, 1984, 883. [2] La Iglesia considera que sus obispos son los sucesores de los apóstoles de Jesús y el líder de la Iglesia, el Obispo de … La educación que da acceso a la cultura es también educación en el ejercicio responsable de la libertad. La democracia cristiana es una rama del conservadurismo que tiene sus orígenes en el pensamiento de figuras tales como Jacques Maritain, Emmanuel Mounier o Luigi Sturzo, la doctrina social de la Iglesia católica y la ética social protestante. 3. Juan Pablo II, Encíclica Laborem exercens, n. 20: AAS 73, 1981, 629-632; Instrucción Libertatis nuntius, VII, 8; VIII, 5-9; XI, 11-14: AAS 76, 1984, 891-892. Ha sido explicado por primera vez por el Papa Pío XI en su carta encíclica Quadragesimo Anno. Reafirma el Decálogo poniéndolo en relación con la caridad, que es su verdadera plenitud[65]. Sal 25; 31; 35; 55; Instrucción Libertatis nuntius, IV, 5: AAS 76, 1984, 883. A partir de esta noción de libertad se precisa el alcance de la noción de liberación temporal; se trata del conjunto de procesos que miran a procurar y garantizar las condiciones requeridas para el ejercicio de una auténtica libertad humana. Pero las promesas divinas de liberación y su victorioso cumplimiento en la muerte y en la resurrección de Cristo, son el fundamento de la «gozosa esperanza» de la que la comunidad cristiana saca su fuerza para actuar resuelta y eficazmente al servicio del amor, de la justicia y de la paz. por ejemplo 1 Tes 2, 7-12; Flp 2, 1-4; Gál 2, 12-20; 1 Cor 13, 4-7; 2 Jn 12; 3 Jn 14; Jn 11, 1-5. 1. [130] Cf. Al restituir al hombre la verdadera libertad, la liberación radical obrada por Cristo le asigna una tarea: la praxis cristiana, que es el cumplimiento del gran mandamiento del amor. Juan Pablo II, Exhortación Apostólica Reconciliatio et paenitentia, n. 16: AAS 77, 1985, 213-217. Todo hombre, hallado digno ante el tribunal de Cristo por haber hecho, con la gracia de Dios, buen uso de su libre albedrío, obtendrá la felicidad[80]. [29] Cf. El hombre, negando o intentando negar a Dios, su Principio y Fin, altera profundamente su orden y equilibrio interior, el de la sociedad y también el de la creación visible[25]. Resulta evidente que en el marco la reconfiguración de los servicios públicos provocada en nuestro país a partir de las privatizaciones de la década de 1980, surge un nuevo modelo de ellos, forzado tanto ideológica como normativamente a partir de los cambios producidos desde la década de 1970 y que solo a fines de la década de 1990 ha empezado a … Dios se nos revela como Padre de misericordia, al que podemos presentarnos con total confianza. Esta es la primera confesión de nuestra fe, que viene a confirmar las más altas intuiciones del pensamiento humano. Aunque son necesarias, tienden con frecuencia a estabilizarse y cristalizar como mecanismos relativamente independientes de la voluntad humana, paralizando con ello o alterando el desarrollo social y generando la injusticia. Entre la afirmación de Dios y la libertad humana habría una incompatibilidad radical. Sufren en su corazón la esclavitud a la que el pueblo «rapado hasta la nuca» ha sido reducido a causa de sus pecados. ... Sólo se les impone una condición: la de que respeten los principios del derecho natural, observen la doctrina social que la Iglesia enseña y obedezcan las directrices de las autoridades eclesiásticas. Su visión moral en esta materia « se apoya en las tres piedras angulares fundamentales de la dignidad humana, la solidaridad y la subsidiariedad » [202] . Dios quiere ser adorado por hombres libres. Pablo VI, Carta Apostólica Octogesima adveniens, n. 4: AAS 63, 1971, 403-404; Juan Pablo II, Discurso inaugural de Puebla, III, 7: AAS 71, 1979, 203. Pablo VI, Exhortación Apostólica Evangelii nuntiandi, n. 18: AAS 68, 1976, 17-18; Instrucción Libertatis nuntius, XI, 9: AAS 76, 1984, 901. El, ejerciendo su libertad, decide sobre sí mismo y se forma a sí mismo. La expansión de una personalidad libre, que es un deber y un derecho para todos, debe ser ayudada y no entorpecida por la sociedad. Anuncia con gozo la llegada mesiánica y alaba al Señor que se prepara a liberar a su Pueblo[47]. Existe un criterio ético cuyas exigencias no se deben rehuir. En virtud del segundo, ni el Estado ni sociedad alguna deberán jamás substituir la iniciativa y la responsabilidad de las personas y de los grupos sociales intermedios en los niveles en los que éstos pueden actuar, ni destruir el espacio necesario para su libertad[111]. II. Más aún, cada hombre está orientado hacia los demás hombres y necesita de su compañía. Jamás podrá admitirse, ni por parte del poder constituido, ni por parte de los grupos insurgentes, el recurso a medios criminales como las represalias efectuadas sobre poblaciones, la tortura, los métodos del terrorismo y de la provocación calculada, que ocasionan la muerte de personas durante manifestaciones populares. Se muestra solidaria con quienes no cuentan en una sociedad que les rechaza espiritualmente y, a veces, físicamente. De esta dignidad derivan unos derechos, y unos deberes naturales. × Close Log In. El hombre pertenece a diversas comunidades: familiar, profesional, política; y en su seno es donde debe ejercer su libertad responsable. II Sínodo Extraordinario, Relatio finalis II, 6, 6: L'Osservatore Romano, Edición en Lengua Española, 22 de diciembre de 1985, pág. Es pues la armonía con las exigencias de la naturaleza humana lo que hace que la voluntad sea auténticamente humana. Poseyendo las arras del Espíritu[78], el Pueblo de Dios es conducido a la plenitud de la libertad. En la Doctrina social de la Iglesia se entiende por principio de subsidiariedad el principio en virtud del cual el Estado solo debe ejecutar una labor orientada al bien común cuando advierte que los particulares o los organismos intermedios no la realizan adecuadamente, sea por imposibilidad o sea por cualquier otra razón.. Pero la libertad del hombre es finita y falible. 16. La verdad del misterio de salvación actúa en el hoy de la historia para conducirla a la humanidad rescatada hacia la perfección del Reino, que da su verdadero sentido a los necesarios esfuerzos de liberación de orden económico, social y político, impidiéndoles caer en nuevas servidumbres. Compete a los padres el derecho de elegir la escuela a donde enviar a sus propios hijos y crear y sostener centros educativos de acuerdo con sus propias convicciones. Su constitución jerárquica estaría opuesta a la igualdad; su Magisterio estaría opuesto a la libertad de pensamiento. ... importantes, en realidad son las más necesarias (cfr. Se puede hablar entonces de estructura marcada por el pecado, pero no se pueden condenar las estructuras en cuanto tales. El Evangelio es fuerza de vida eterna, dada ya desde ahora a quienes lo reciben[86]. CAPÍTULO I - SITUACIÓN DE LA LIBERTAD EN EL MUNDO CONTEMPORÁNEO, I. Conquistas y amenazas del proceso moderno de liberación. Op. 1. Mt 22,36-40)». A veces esta reivindicación ha sido orientada hacia proyectos colectivistas que engendran injusticias tan graves como aquellas a las que pretendían poner fin. Anunciado por los Profetas como el Mesías de los pobres[99], fue entre ellos, los humildes, los «pobres de Yavé», sedientos de la justicia del Reino, donde él encontró corazones dispuestos a acogerle. Por último, es fiel a su misión cuando emite su juicio acerca de los movimientos políticos que tratan de luchar contra la miseria y la opresión según teorías y métodos de acción contrarios al Evangelio y opuestos al hombre mismo[94]. (Compendio de la Doctrina Social de la Iglesia, n° 384, San Pablo, Chile, 2008). La conciencia de la libertad y de la dignidad del hombre, junto con la afirmación de los derechos inalienables de la persona y de los pueblos, es una de las principales características de nuestro tiempo. La libertad no es la libertad de hacer cualquier cosa, sino que es libertad para el Bien, en el cual solamente reside la Felicidad. Todo compromiso en favor de la liberación y de la libertad supone, por consiguiente, que se afronte esta dramática paradoja. Derecho a la instrucción y a la cultura. Así, pues, al enseñar la confianza que se apoya en Dios, la esperanza de la vida eterna, el amor a la justicia, la misericordia que llega hasta el perdón y la reconciliación, las Bienaventuranzas permiten situar el orden temporal en función de un orden trascendente que, sin quitarle su propia consistencia, le confiere su verdadera medida. La dimensión soteriológica de la liberación no puede reducirse a la dimensión socioética que es una consecuencia de ella. 533-534. El destino universal de los bienes. Los discípulos de Jesús, con el desprendimiento de las riquezas que permite compartir con los demás y abre el Reino[104], dieron testimonio mediante el amor a los pobres y desdichados, del amor del Padre manifestado en el Salvador. Aunque el hombre no está a cubierto de catástrofes naturales, sin embargo han sido descartadas muchas de las amenazas de la naturaleza. Todos los hombres de buena voluntad están convocados a estas tareas, que se imponen de una manera apremiante a la conciencia cristiana. 1. Juan Pablo II, Homilía en Drogheda, 30 de septiembre de 1979: AAS 71, 1979, 1076-1085; Documento de la III Conferencia del Episcopado Latinoamericano en Puebla, nn. Yavé es el recurso supremo de los pequeños y de los oprimidos, y el Mesías tendrá la misión de defenderlos[40]. Dios libera a su pueblo, le da una descendencia, una tierra, una ley, pero dentro de una Alianza y para una Alianza. La existencia de Jesús de Nazaret —verdadero «Evangelio del trabajo»— nos ofrece el ejemplo vivo y el principio de la radical transformación cultural indispensable para resolver los graves problemas que nuestra época debe afrontar. sometiendo cada vez más la naturaleza, corre el riesgo de destruir los fundamentos de nuestro propio futuro, de manera que la humanidad actual se convierte en enemiga de las generaciones futuras. Al someter con un poder ciego las fuerzas de la naturaleza, ¿no se está a un paso de destruir la libertad de los hombres del mañana? Mt 25, 40. De Cristo redentor arrancan su pensamiento y su acción cuando, ante los dramas que desgarran al mundo, la Iglesia reflexiona sobre el significado y los caminos de la liberación y de la verdadera libertad. [2] La Iglesia considera que sus obispos son los sucesores de los apóstoles de Jesús y el líder de la Iglesia, el Obispo de … En su designio de salvación, Dios dio su Ley a Israel. Él es la fuente del valor, de la audacia y del heroísmo: «Donde está el Espíritu del Señor está la libertad» (2 Cor 3, 17). The new social question in the world and Latin America: beyond the poverty. CAPÍTULO II VOCACIÓN DEL HOMBRE A LA LIBERTAD Y DRAMA DEL PECADO. Recordando el primer mandamiento, Jesús añade a continuación: «El segundo, semejante a éste, es: Amarás al prójimo como a ti mismo. La idolatría es una forma extrema del desorden engendrado por el pecado. Pablo VI, Exhortación Apostólica Evangelii nuntiandi, nn. El hombre pecador, que rehúsa adherirse a Dios, es llevado necesariamente a ligarse de una manera falaz y destructora a la creatura. 38. or reset password. Existe una exigencia de orden moral que se ha expresado en la formulación de los derechos del hombre. Esta es la idea del Papa Francisco y también de toda la Doctrina Social de la Iglesia. Ya antes que él, los Profetas y los Sabios de Israel veían en las desgracias del pueblo un castigo por su pecado de idolatría, y en el «corazón lleno de maldad» (Eclo 9, 3)[29]la fuente de la esclavitud radical del hombre y de las opresiones a que somete a sus semejantes. ?gicos para un dialogo. Esta participación en el conocimiento de Dios es su emancipación ante las pretensiones de dominio por parte de los detentores del saber: «Conocéis todas las cosas ... y no tenéis necesidad de que nadie os enseñe» (1 Jn 2, 20 b. En su momento fue muchas veces incomprendida. Los hijos de Abraham fueron llamados a entrar con todas las naciones en la Iglesia de Cristo, para formar con ellas un solo Pueblo de Dios, espiritual y universal[49]. Sin embargo, ya se trate de la conquista de la naturaleza, de su vida social y política o del dominio del hombre sobre si mismo, a nivel individual y colectivo, todos pueden constatar que no solamente los progresos realizados están lejos de corresponder a las ambiciones iniciales, sino que han surgido también nuevas amenazas, nuevas servidumbres y nuevos terrores, al mismo tiempo que se ampliaba el movimiento moderno de liberación. La Iglesia lo hace en virtud de su apertura misionera para la salvación integral del mundo, en el respeto de la identidad de cada pueblo y nación. [136] Cf. Tienen la obligación moral de no mantener capitales improductivos y, en las inversiones, mirar ante todo al bien común. [16] Cf. Su visión moral en esta materia « se apoya en las tres piedras angulares fundamentales de la dignidad humana, la solidaridad y la subsidiariedad » [202] . La doctrina social de la Iglesia es el conjunto de enseñanzas sociales que la Iglesia católica llama a practicar a cualquier cristiano o persona de cualquier origen y lugar, fundado en el Evangelio, en el Magisterio y en la Tradición. Pero la intervención humana no es «creadora»; encuentra ya una naturaleza material que, como ella, tiene su origen en Dios Creador y de la cual el hombre ha sido constituido «noble y sabio guardián»[24]. Las desigualdades contrarias a la justicia en la posesión y el uso de los bienes materiales están acompañadas y agravadas por desigualdades también injustas en el acceso a la cultura. Deben llevarla a cabo, conscientes de que la finalidad de la Iglesia es extender el Reino de Cristo para que todos los hombres se salven y por su medio el mundo esté efectivamente orientado a Cristo[121]. Finalmente y sobre todo, el movimiento moderno de liberación debía aportar al hombre la libertad interior, bajo forma de libertad de pensamiento y libertad de decisión. Esta doctrina debe inspirar reformas antes de que sea demasiado tarde. [40] Cf. [10] Cf. Breve reseña de los principales puntos de la nueva encíclica de Benedicto XVI, "Caritas in veritate": La Caridad en la verdad, sobre el desarrollo humano integral en la caridad y en la verdad . Por la Palabra de Dios y los sacramentos, el hombre es liberado ante todo del poder del pecado y del poder del Maligno que lo oprimen, y es introducido en la comunión de amor con Dios. Ha sido explicado por primera vez por el Papa Pío XI en su carta encíclica Quadragesimo Anno. En el Antiguo Testamento la acción liberadora de Yavé, que sirve de modelo y punto de referencia a todas las otras, es el Éxodo de Egipto, «casa de esclavitud». En efecto, esto exige el criterio de la verdad y una justa relación con la voluntad ajena. COMPENDIO DE LA DOCTRINA SOCIAL DE LA IGLESIA . 10. El pecado, raíz de las alienaciones humanas. La obra de salvación aparece, de esta manera, indisolublemente ligada a la labor de mejorar y elevar las condiciones de la vida humana en este mundo. [8] Instrucción Libertatis nuntius, XI, 10: AAS 76, 1984, 905-906. Comenzó a implementarse en Europa, a principios del siglo pasado. La Iglesia lee el Antiguo Testamento a la luz de Cristo muerto y resucitado por nosotros. Si el sistema de relaciones de trabajo, llevado a la práctica por los protagonistas directos —trabajadores y empleados, con el apoyo indispensable de los poderes públicos— logra instaurar una civilización del trabajo, se producirá entonces en la manera de ver de los pueblos e incluso en las bases institucionales y políticas, una revolución pacífica en profundidad. La gratuidad, esa revolución económica. La técnica. 2010 • Carlos E Barba Solano. De ahí que el Estado Contemporá-neo se presenta ante los ojos del estu-dioso, del investigador, del analista, como una realidad elemental y miste-riosa. Otro principio relacionado con la vida social es la solidaridad. Cada hombre tiene un derecho a la cultura, que es característica específica de una existencia verdaderamente humana a la que tiene acceso por el desarrollo de sus facultades de conocimiento, de sus virtudes morales, de su capacidad de relación con sus semejantes, de su aptitud para crear obras útiles y bellas. El profundo movimiento moderno de liberación resulta ambiguo porque ha sido contaminado por gravísimos errores sobre la condición del hombre y su libertad. Pablo VI, Encíclica Populorum progressio , n. 55: AAS 59, 1967, 284. La Buena Nueva anunciada a los pobres. Pero quienes desacreditan la vía de las reformas en provecho del mito de la revolución, no solamente alimentan la ilusión de que la abolición de una situación inicua es suficiente por si misma para crear una sociedad más humana, sino que incluso favorecen la llegada al poder de regímenes totalitarios[117]. Desde el comienzo de los tiempos modernos hasta el Renacimiento, se pensaba que la vuelta a la Antigüedad en filosofía y en las ciencias de la naturaleza permitiría al hombre conquistar la libertad de pensamiento y de acción, gracias al conocimiento y al dominio de las leyes naturales. INTRODUCCIÓN. Al escapar del alcance de la verdad, viene a ser presa de la arbitrariedad; entre los hombres, las relaciones fraternas se han abolido para dar paso al terror, al odio y al miedo. or. El principiode subsidiaridad. Solamente un proceso acabado de liberación puede crear condiciones mejores para el ejercicio efectivo de la libertad. La doctrina social de la iglesia: fuentes, principios y concepción de los derechos humanos . Pero el Señor Jesús le ha confiado la palabra de verdad capaz de iluminar las conciencias. De lo que se deduce que el principio de solidaridad es el primer principio derivado de la DSI. Son así conscientes de tener parte en el conocimiento más alto al que está llamada la humanidad[14]. 53. Juan Pablo II, Exhortación Apostólica Reconciliatio et paenitentia, n. 13: AAS 77, 1985, 208-211. Declaración Gravissimum educationis, nn. Ella llama al hombre y a las sociedades a vencer las situaciones de pecado y de injusticia, y a establecer las condiciones para una verdadera libertad. Dependiendo totalmente de Dios y plenamente orientada hacia Él por el empuje de su fe, María, al lado de su Hijo, es la imagen más perfecta de la libertad y de la liberación de la humanidad y del cosmos. Por lo mismo, la Iglesia pone todo su interés en mantener clara y firmemente a la vez la unidad y la distinción entre evangelización y promoción humana: unidad, porque ella busca el bien total del hombre; distinción, porque estas dos tareas forman parte, por títulos diversos, de su misión. Bajo sus múltiples formas —indigencia material, opresión injusta, enfermedades físicas y psíquicas y, por último, la muerte— la miseria humana es el signo manifiesto de la debilidad congénita en que se encuentra el hombre tras el primer pecado y de la necesidad de salvación. Lo hacemos en comunión con todas las Iglesias Particulares presentes en América. El Santo Padre Juan Pablo II, durante una Audiencia concedida al infrascripto Prefecto, ha aprobado esta Instrucción, acordada en reunión ordinaria de la Congregación para la Doctrina de la Fe, y ha ordenado su publicación. En virtud del segundo, ni el Estado ni sociedad alguna deberán jamás substituir la iniciativa y la responsabilidad de las personas y de los grupos sociales intermedios en los niveles en los que éstos pueden actuar, ni destruir el espacio necesario para su libertad [111] . Juan Pablo II, Encíclica Redemptor hominis, n. 15: AAS 71, 1979, 286. «Seréis como dioses» (Gén 3, 5). El hombre amenazado por su dominio de la naturaleza. Prioridad del trabajo sobre el capital. La servidumbre, que había sufrido hasta entonces, se apoyaba sobre la ignorancia y los prejuicios. Al saludo de Isabel, la Madre de Dios responde dejando prorrumpir su corazón en el canto del Magnificat. Mt 22,36-40)». El acontecimiento mayor y fundamento del Éxodo tiene, por tanto, un significado a la vez religioso y político. Instrucción Libertatis nuntius, XI, 10: AAS 76, 1984, 901. La promesa de la resurrección satisface gratuitamente el afán de justicia verdadera que está en el corazón humano. Si, aun siendo una persona adulta, no presta los … El sentido de la fe, que es el origen de una experiencia radical de la liberación y de la libertad, ha impregnado, en grado diverso, la cultura y las costumbres de los pueblos cristianos. Y, a pesar de ello esta voluntad desemboca casi siempre en la esclavitud y la opresión. Economía Social de mercado Afinidades Entre la economía social de mercado y la Doctrina Social de la Iglesia existe gran afinidad, y por ende, este modelo no sólo constituye un sistema aceptable para los cristianos, sino también una auténtica "opción por los pobres". [46] Sof 3, 12-20; cf. Existe una moralidad de los medios[118]. Por ello, tanto en uno como en otro campo, el laico —fiel y ciudadano a la vez— debe dejarse guiar constantemente por su conciencia cristiana[122]. La parábola del Buen Samaritano muestra que el amor lleno de compasión, cuando se pone al servicio del prójimo, destruye los prejuicios que levantan a los grupos étnicos y sociales unos contra otros[71]. El indiferentismo y el agnosticismo deliberado van en el mismo sentido. La voluntad de ser libre está viva en cada persona. El principiode los valores, fundamentalmente estos cuatro: la verdad, la libertad, la justicia, el amor. Vincent. El texto entre paréntesis, fue declarado EXEQUIBLE en la misma Sentencia, siempre que se entienda que, en los procesos de investigación de la paternidad o maternidad y de impugnación de la paternidad o maternidad, le corresponde al juez del proceso, en cada caso concreto, determinar a la luz del principio de interés superior del menor y de las circunstancias … Los derechos del hombre y «las libertades». La dependencia de la creatura con respecto al Creador o la dependencia de la conciencia moral con respecto a la ley divina serían para él servidumbres intolerables. - Relación de la persona con la sociedad civil. La gestión política y económica de la sociedad no entra directamente en su misión[85]. A este respecto, conviene recordar la grave responsabilidad moral y política de los intelectuales. La dimensión social del ser humano tiene además otro significado: solamente la pluralidad y la rica diversidad de los hombres pueden expresar algo de la riqueza infinita de Dios. Pretende ser un dios, cuando quiere codiciarlo todo y poderlo todo y con ello, olvidar que es finito y creado. Declaración Dignitatis humanae, n. 10. El nuevo poder tecnológico está unido al poder económico y lleva a su concentración. CAPÍTULO IV MISIÓN LIBERADORA DE LA IGLESIA, 61. Los Profetas no cesan de recordar a Israel las exigencias de la Ley de la Alianza. Lejos de constituir un sistema cerrado, queda abierto permanentemente a las cuestiones nuevas que no cesan de presentarse; requiere, además, la contribución de todos los carismas, experiencias y competencias. Son pilares fundamentales de nuestra convivencia y verdadera garantía para que el abuso del Estado no entre en la vida privada y en la actividad pública de los ciudadanos y las familias. 5; ib., 637-647. [26] Cf. Sin embargo, dependen siempre de la responsabilidad del hombre, que puede modificarlas, y no de un pretendido determinismo de la historia. Constitución pastoral Gaudium et spes, n. 40, par. Se impone, por tanto, un esfuerzo generoso de evangelización de las culturas, las cuales se verán regeneradas en su reencuentro con el Evangelio. 612-616. Esta tarea requiere una nueva reflexión sobre lo que constituye la relación del mandamiento supremo del amor y el orden social considerado en toda su complejidad. También por ello, los oprimidos por la miseria son objeto de un amor de preferencia por parte de la Iglesia que, desde los orígenes, y a pesar de los fallos de muchos de sus miembros, no ha cesado de trabajar para aliviarlos, defenderlos y liberarlos. 1-4: AAS 63, 1971, 401-404. Porque donde faltan la verdad y el amor, el proceso de liberación lleva a la muerte de una libertad que habría perdido todo apoyo. El sentido de la fe, tan vivo en los pequeños, sabe reconocer a simple vista toda la riqueza a la vez soteriológica y ética del Magnificat[48]. 2. San Pablo nos lo advierte: «Para que gocemos de libertad, Cristo nos ha hecho libres» (Gal 5, 1). Éste es un principio importante de la interpretación bíblica, que tiene en cuenta que el Espíritu Santo no inspiró sólo una parte, sino la Biblia entera, y que en … Dicha opción no es exclusiva. Sin embargo, por su libertad, el hombre continúa siendo dueño de su actividad. Otro tanto han hecho numerosos estudiosos, en todos los Continentes. La combinación de estos tres pilares constituye la base sólida de todo el edificio político. [2] Cf. Los «pobres de Yavé» saben que la comunión con Él [44]es el bien más precioso en el que el hombre encuentra su verdadera libertad[45]. Una nueva fase de la historia de la libertad. En esta voluntad de ser un dios y de someterlo todo a su propio placer se esconde una perversión de la idea misma de Dios. Por ello, aunque basándose en principios siempre válidos, comporta también juicios contingentes. Si su edad es menor a la legal establecida, puede considerarse trabajo infantil y puede ser ilegal a menos que tenga, en ciertos casos, permiso de sus padres o tutores. La cohesión de la sociedad en la justicia y la paz es así promovida y reforzada[92]. Email. En ello está la raíz de las tragedias que acompañan la historia moderna de la libertad. Estos criterios permiten también juzgar el valor de las estructuras, las cuales son el conjunto de instituciones y de realizaciones prácticas que los hombres encuentran ya existentes o que crean, en el plano nacional e internacional, y que orientan u organizan la vida económica, social y política. Por consiguiente, todo hombre tiene derecho a un trabajo, que debe ser reconocido en la práctica por un esfuerzo efectivo que mire a resolver el dramático problema del desempleo. PARRA, Freddy Pensamiento Social de la Iglesia y Ciencias Sociales: Horizontes Teol? Es fiel a su misión cuando se opone a los intentos de instaurar una forma de vida social de la que Dios esté ausente, bien sea por una oposición consciente, o bien debido a negligencia culpable[93]. Saca su impulso de la caridad divina. [58] Cf. 6; Pío XI, Encíclica Divini illius Magistri, nn. El mismo Señor Jesús ha anunciado en el Sermón de la Montaña los preceptos de la Ley nueva; con su sacrificio ofrecido en la Cruz y su resurrección gloriosa, ha vencido el poder del pecado y nos ha obtenido la gracia del Espíritu Santo que hace posible la perfecta observancia de la Ley de Dios [67] y el acceso al perdón, si caemos nuevamente en el pecado. 3; Decreto Apostolicam actuositatem, n. 7. Nuestro actuar y trabajo siempre son iluminados por el Evangelio y por la doctrina social de … La centralidad del trabajo y la estructura de clases para el estudio de la desigualdad y el desarrollo. El mandamiento supremo del amor conduce al pleno reconocimiento de la dignidad de todo hombre, creado a imagen de Dios. Debía poner fin al dominio del hombre sobre el hombre y promover la igualdad y fraternidad de todos los hombres. De aquí se desprende la exigencia de una participación que, por encima de la repartición de los frutos del trabajo, deberá comportar una verdadera dimensión comunitaria a nivel de proyectos, de iniciativas y de responsabilidades[130]. En esta vuelta a la creatura (conversio ad creaturam), concentra sobre ella su anhelo insatisfecho de infinito. Entonces, Dios «enjugará las lágrimas de sus ojos, y la muerte no existirá más, ni habrá duelo, ni gritos, ni trabajo, porque todo esto es ya pasado» (Ap 21, 4). [24] Cf. Dios llama al hombre a la libertad. GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA.indd 1 4/16/12 10:23:05 AM GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA.indd 2 4/16/12 10:23:07 AM GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA.indd 3 4/16/12 10:23:08 AM Universidad Na [20] Cf. Por consiguiente el hombre se hace libre cuando llega al conocimiento de lo verdadero, y esto —prescindiendo de otras fuerzas— guía su voluntad. ¿Qué fuerzas podrían eliminar el recurso sistemático a las armas y dar su autoridad al derecho? [133] Cf. importante al resolver problemas, ya que si los p roblemas, al. [134] Cf. Al mismo tiempo está cargado de promesas de verdadera libertad y amenazas de graves servidumbres. Estimulará también la búsqueda de la formación moral del carácter y la profundización de la vida espiritual. Password. Hay que procurar a toda costa que estas riquezas del sensus fidei puedan manifestarse plenamente y dar frutos en abundancia. Una verdadera civilización del trabajo. Download Free PDF View PDF. 1245. A la luz del Evangelio, un buen número de leyes y de estructuras parecen que llevan la marca del pecado y prolongan su influencia opresora en la sociedad. Sin embargo, piensa que, ante todo, hay que apelar a las capacidades espirituales y morales de la persona y a la exigencia permanente de conversión interior, si se quiere obtener cambios económicos y sociales que estén verdaderamente al servicio del hombre. Comprender la razón de ser de la Teología Moral - Doctrina Social de la Iglesia y su Universidad Católica de Santiago del Estero Departamento Académico Rafaela. Lo contrario de la libertad sería así la dependencia de nuestra voluntad ante una voluntad ajena. El hombre, arrebatando a la naturaleza sus secretos, la sometía a su servicio. Cuando el hombre quiere liberarse de la ley moral y hacerse independiente de Dios, lejos de conquistar su libertad, la destruye. La conquista de la libertad constituía así el objetivo perseguido a través del desarrollo de la ciencia y de la técnica. [42] Cf. Aprenderá el recto uso de su decisión si aprende a concordar su voluntad a la de los demás, en vistas de un verdadero bien. [113] Cf. De este modo, la solución para la mayor parte de los gravísimos problemas de la miseria se encuentra en la promoción de una verdadera civilización del trabajo. El acceso de todos a los bienes necesarios para una vida humana —personal y familiar— digna de este nombre, es una primera exigencia de la justicia social. Y San Pablo dice que la caridad es el cumplimiento pleno de la Ley[69]. Entre los componentes sociales del cambio global se incluyen los efectos laborales de algunas innovaciones tecnológicas, la exclusión social, la inequidad en la disponibilidad y el consumo de energía y de otros servicios, la fragmentación social, el crecimiento de la violencia y el surgimiento de nuevas formas de agresividad social, el … 79: AAS 55, 1963, 294-296. Es necesario, por consiguiente, actuar tanto para la conversión de los corazones como para el mejoramiento de las estructuras, pues el pecado que se encuentra en la raíz de las situaciones injustas es, en sentido propio y primordial, un acto voluntario que tiene su origen en la libertad de la persona. El Espíritu Santo introduce a la Iglesia y a los discípulos de Jesucristo «hacia la verdad completa» (Jn 16, 13). • La solidaridad es una virtud personal y social capaz de crear energías y condiciones para la justicia social; f El principio de subsidiariedad. Las personas son los sujetos activos y responsables de la vida social[109]. La diversidad de carismas en el Pueblo de Dios, que son carismas de servicio, no se ha opuesto a la igual dignidad de las personas y a su vocación común a la santidad. Los esfuerzos desplegados han llevado a notables resultados. Éste es un principio importante de la interpretación bíblica, que tiene en cuenta que el Espíritu Santo no inspiró sólo una parte, sino la Biblia entera, y que en … Exigencias evangélicas de transformación en profundidad, 81. La Iglesia no se aparta de su misión cuando se pronuncia sobre la promoción de la justicia en las sociedades humanas o cuando compromete a los fieles laicos a trabajar en ellas, según su vocación propia. La tarea educativa pertenece fundamental y prioritariamente a la familia. Jesús, el nuevo Moisés, comenta en ellas el Decálogo, la Ley de la Alianza, dándole su sentido definitivo y pleno. Así, tanto en el interior de los pueblos como entre ellos, se han creado relaciones de dependencia que, en los últimos veinte años, han ocasionado una nueva reivindicación de liberación. Constitución pastoral Gaudium et spes, n. 76, par. [135] Cf. Se trata de uno de los principios más largamente … Cristo nos ha liberado del más radical de los males, el pecado y el poder de la muerte, para devolvernos la auténtica libertad y para mostrarnos su camino. Por la fe éstos saben que son el objeto del amor infinito de Dios. Los Pastores y todos aquellos, sacerdotes y laicos, religiosos y religiosas, que trabajan, a menudo en condiciones muy duras, en la evangelización y la promoción humana integral, deben estar llenos de esperanza pensando en los extraordinarios recursos de santidad contenidos en la fe viva del Pueblo de Dios. El tercer principio clásico de la doctrina social es el principio de la subsidiariedad. 31. Ellas apartan de la búsqueda utópica y destructiva de un mundo perfecto, pues «pasa la apariencia de este mundo» (1 Cor 7, 31). El tema de la libertad y de la liberación tiene un alcance ecuménico evidente. Es verdad que, para entender adecuadamente el sentido del mensaje central de un texto, es necesario ponerlo en conexión con la enseñanza de toda la Biblia, transmitida por la Iglesia. GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA.indd 1 4/16/12 10:23:05 AM GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA.indd 2 4/16/12 10:23:07 AM GOBERNABILIDAD Y GOBERNANZA.indd 3 4/16/12 10:23:08 AM Universidad Na 69. Primero la familia y luego el estado El término subsidiariedad y su expresión sinónima «la acción subsidiaria» han sido introducidos por la Doctrina Social de la Iglesia a partir de Pío XI, dando una acepción nueva al adjetivo «subsidiario» y a su sustantivo matriz «subsidio». Significado cristológico del Antiguo Testamento. INTRODUCCIÓN. San Pablo proclama el don de la Ley nueva del Espíritu en oposición a la ley de la carne o de la concupiscencia que inclina al hombre al mal y lo hace incapaz de escoger el bien[63]. Dios no ha creado al hombre como un «ser solitario», sino que lo ha querido como un «ser social»[20].La vida social no es, por tanto, exterior al hombre, el cual no puede crecer y realizar su vocación si no es en relación con los otros. El ateísmo, falsa emancipación de la libertad. 1192. [27] Cf. La Iglesia y las inquietudes del hombre. [84] Cf. Intentaba liberar al hombre de la superstición y de los miedos ancestrales, entendidos como obstáculos para su desarrollo. Anales de la Facultad de Teolog?-a, Vol. Cada uno de ellos puede decir: «Vivo en la fe del Hijo de Dios, el cual me amó y se entregó a sí mismo por mí» (Gal 2, 20 b). Dado en Roma, en la sede de la Congregación, el día 22 de marzo de 1986, Solemnidad de la Anunciación del Señor. Está subordinado al principio superior del destino universal de los bienes[131]. [92] Cf. Constitución pastoral Gaudium et spes, n. 59. Pero la justicia que debe regular las relaciones entre los hombres, y el derecho que es su expresión jurídica, pertenecen también a la trama más característica de la Ley bíblica. Es cierto que ante la amplitud y complejidad de la tarea, que puede exigir la donación de uno hasta el heroísmo, muchos se sienten tentados por el desaliento, el escepticismo o la aventura desesperada. Somos el Secretariado Nacional de Pastoral Social /Cáritas Colombiana, un organismo eclesial, sin ánimo de lucro, dependiente de la Conferencia Episcopal que busca la verdad, la reconciliación, la justicia y la caridad en las relaciones y estructuras básicas de nuestra sociedad. La alimentación está garantizada a un número de personas cada vez mayor. Act 2, 39; Rom 10, 12; 15, 7-12; Ef 2, 14-18. 1. 10. Esto exige que se busque prioritariamente la consolidación o la creación de nuevos puestos de trabajo para la producción de bienes realmente útiles. Lo hacemos en comunión con todas las Iglesias Particulares presentes en América. En cuanto a las normas jurídicas de la vida social y política de Israel, la Iglesia apostólica, como Reino de Dios inaugurado sobre la tierra, ha tenido conciencia de que no estaba ya sujeta a ellas. [6] Cf. 1.- LA CONCEPCION DEL HOMBRE En una economía social de … Este principio enseña que las decisiones en la sociedad deben dejarse al nivel más bajo posible, es decir al nivel más cercano de las personas sobre las que incide la decisión. II. Por ello, la creación de puestos de trabajo es una tarea social primordial que han de afrontar los individuos y la iniciativa privada, e igualmente el Estado. En virtud del segundo, ni el Estado ni sociedad alguna deberán jamás substituir la iniciativa y la responsabilidad de las personas y de los grupos sociales intermedios en los niveles en los que éstos pueden actuar, ni destruir el espacio necesario para su libertad [111] . Sus manifestaciones de poder son evidentes: la seguridad pública, el ejército, los tribunales, las adua-nas, etc. Reconciliados con Él [56] y recibiendo la paz de Cristo que el mundo no puede dar[57], estamos llamados a ser en medio de los hombres artífices de paz[58]. La libertad de los pequeños y de los pobres. La naturaleza dual de "lo" como artículo y como pronombre, su género neutro y su origen etimológico dificultan la clasificación de la forma lo ante sintagmas adjetivales, sintagmas preposicionales y oraciones subordinadas introducidas por "que".
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